Avanzar en saneamiento de aguas residuales significa mejorar en sostenibilidad y en la reutilización de un recurso vital…

La importancia medioambiental de las aguas residuales

Según datos de la ONU, los procesos de tratamiento y depuración de las aguas residuales representan más del 1,5% de las emisiones de gases de efecto invernadero a escala global. En concreto, el sector del saneamiento emite dos gases especialmente contaminantes, como son el metano y el óxido nitroso.

Paradójicamente, la propia ONU también indica en su informe Aguas residuales: convirtiendo el problema en solución que estas aguas podrían jugar un papel esencial en la lucha contra el cambio climático. En concreto, proporcionando energía sostenible a 500 millones de personas, suministrando agua reutilizada en cantidades ingentes y compensando el uso mundial de fertilizantes. Para lograrlo, eso sí, los expertos de la ONU recuerdan que sería necesario apostar decididamente por nuevas políticas de saneamiento.

Mucho por hacer en saneamiento de aguas residuales

Más del 60% de las aguas residuales generadas en todo el mundo son todavía vertidas al entorno natural sin recibir el necesario tratamiento previo. Esta situación tiene importantes consecuencias y genera múltiples problemas, tanto para la salud del medio ambiente como de las personas (según la ONU, el saneamiento de aguas residuales deficiente hace que un millón y medio de niños mueran cada año en el planeta).

Uno de los objetivos de nuestra sociedad, por todo ello, es seguir avanzando en materia de saneamiento y tratamiento de aguas residuales. Entre otras muchas cosas, porque el saneamiento no solo elimina los elementos contaminantes que contienen las aguas fecales, sino porque también es capaz de transformarlas en un recurso vital que puede reutilizarse en riegos agrícolas y urbanos, pero también en la recarga de acuíferos o con fines recreativos e incluso industriales.

Algunos pueblos ya preparan las alcantarillas para el otoño

Siempre se ha dicho que más vale prevenir que curar, frase que resulta especialmente aplicable al ámbito del alcantarillado. No en vano, la capacidad de las alcantarillas y los aliviaderos para tragar agua en otoño depende de los esfuerzos en materia de mantenimiento y conservación de la red de saneamiento de aguas residuales que se hace en verano.

Como siempre, hay quienes prefieren dejarlo todo para el último momento, pero también los hay precavidos. Por ejemplo, el municipio de San Fernando, en la provincia de Cádiz, que estos días ha iniciado su campaña de mantenimiento de los más de 9.000 imbornales repartidos por la localidad. El objetivo es evitar problemas como atrancos, atascos o inundaciones cuando lleguen el otoño y las lluvias.

Alcantarillas desaparecidas en el barrio madrileño de Usera

Los vecinos del barrio de Usera, en el sur de la ciudad de Madrid, han denunciado estos días la desaparición de hasta 15 tapas de registro de la red de alcantarillado. En principio, la situación forma parte de un plan de mejora del alcantarillado por parte del Ayuntamiento de Madrid, pero hay quien sospecha que algunas de estas tapas de alcantarillas podrían estar siendo robadas.

La situación no está clara porque la mayoría de tapas de registro sustraídas han sido retiradas por personas uniformadas con el traje habitual de los operarios municipales. Sin embargo, el hecho de que los agujeros se estén dejando al descubierto ha llevado a sospechar a los vecinos de Usera, que en todo caso reclaman una solución que ponga fin al peligro de tener sus calles llenas de enormes agujeros.

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