En una sociedad cada vez más comprometida con la necesidad de proteger el medio ambiente, el sector de la pocería se enfrenta al desafío de adaptar sus prácticas y procedimientos para ser más respetuosa con el entorno. La innovación y el compromiso con la sostenibilidad están abriendo nuevas vías para que el sector, tradicionalmente asociado a procesos invasivos y contaminantes, contribuya a la preservación del ecosistema.
A continuación incluimos algunos de los cambios que estamos adoptando las empresas de pocería para conservar el planeta:
Menos obras gracias a la pocería sin zanjas
Uno de los avances más significativos en este ámbito es la incorporación de tecnologías de pocería sin zanjas, que permiten realizar trabajos de reparación y mantenimiento de las cañerías sin necesidad de obras.
En Serbis Pocería somos especialistas en la aplicación de esta técnica (conocida como manga continua o encamisado reversible), que reduce drásticamente el impacto medioambiental, minimizando la emisión de polvo y gases contaminantes, así como la perturbación del suelo y la vegetación. La pocería sin zanjas incluye también el uso de cámaras de televisión robotizadas y herramientas especializadas para inspeccionar y reparar las redes de alcantarillado desde el interior, evitando la necesidad de hacer excavaciones.
Uso de materiales sostenibles y reciclables
Otro aspecto crucial para la sostenibilidad de la actividad de los poceros es el uso de materiales ecológicos y reciclables. La sustitución de tuberías por productos fabricados con materiales reciclados no sólo disminuye la huella de carbono, sino que también reduce la necesidad de extraer recursos naturales.
Asimismo, la incorporación de bioplásticos y otros materiales biodegradables durante la fabricación de los equipos de pocería está ganando terreno, ofreciendo una alternativa más sostenible a los materiales plásticos convencionales.
Gestión responsable de los residuos
La gestión de los residuos es una de las principales preocupaciones de las empresas de pocería, debido al importante volumen de escombros y desechos que se generan durante las operaciones en las alcantarillas.
Es por eso que en Serbis Pocería estamos adoptando prácticas de gestión de residuos cada vez más estrictas y contamos con la autorización de las autoridades para la absorción y el vaciado de los residuos depositados en fosas sépticas y pozos negros, que posteriormente trasladamos a las Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales (EDAR). Esas aguas son posteriormente reutilizadas para riegos de parques y jardines o usos industriales, cerrando así el ciclo del agua de una manera eficiente y sostenible.
Eficiencia energética y reducción de emisiones
La incorporación de equipos y tecnologías más eficientes desde un punto de vista energético y el impulso de fuentes de energía renovables son también fundamentales para reducir la huella ecológica de la pocería.
Es por eso que estamos impulsando la utilización de las aguas residuales como fuentes de energía limpia y sostenible a través del sistema Therm-Liner, y por lo que también optimizamos nuestros procesos logísticos, reduciendo el número de desplazamientos y el consumo de combustible. Todo ello contribuye significativamente a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.
Concienciación y formación medioambiental
No menos importante es la concienciación y formación de los poceros en prácticas más sostenibles. En este sentido, en Serbis Pocería nos esforzamos por formar a nuestros profesionales sobre la importancia de las prácticas sostenibles y el impacto de su trabajo en el medio ambiente.
En resumen, el sector de la pocería está experimentando una transformación necesaria y positiva hacia la sostenibilidad. A través de la adopción de tecnologías limpias, el uso de materiales sostenibles, una gestión responsable de los residuos, la eficiencia energética, el fomento de las energías renovables y la formación medioambiental, empresas como Serbis Pocería demuestran que es posible llevar a cabo nuestro trabajo de una manera respetuosa con el medio ambiente.
Esta revolución no solo beneficia a nuestro entorno natural, sino que también refuerza la reputación de nuestro sector, demostrando que el progreso y la protección medioambiental pueden ir de la mano.