A continuación incluimos un pequeño resumen de algunas de las noticias más importantes que se han publicado durante los últimos días en relación con la pocería, las alcantarillas y redes de alcantarillado, los sistemas de saneamiento de aguas residuales, las canalizaciones, las cañerías, las tuberías, los atrancos y los atascos:

Las alcantarillas de Córdoba, un terror para las cucarachas

La ciudad de Córdoba ha sido pionera estos días por instalar en su red de alcantarillado un innovador sistema capaz de acabar de un plumazo con las plagas de cucarachas. Se trata de un proyecto piloto por el que se han instalado unos sensores capaces de detectar en tiempo real la presencia de este tipo de insectos.

Una vez que las cucarachas son detectadas por esta tecnología, el sistema envía la información inmediatamente a los gestores de la red de saneamiento de aguas residuales cordobesa, para que los operarios municipales puedan eliminar la plaga. En concreto, estos sensores tienen en cuenta diferentes parámetros que, una vez traducidos, permiten conocer la presencia y concentración de las cucarachas.

Baño de sangre en las alcantarillas de Ibiza

Una zona de la ciudad de Ibiza se ha visto afectada durante los últimos días por un extraño y desagradable fenómeno. De las alcantarillas han brotado ríos de sangre que han invadido la calzada y provocado un insoportable olor. No es la primera vez que esto sucede en la capital de esta isla del Archipiélago Balear, pues ya ocurrió algo parecido hace varios meses.

La razón de este particular baño de sangre es un matadero que hay en Ibiza y que, al parecer, vierte sus desperdicios en la red de alcantarillado municipal (incumpliendo la ordenanza que prohíbe los vertidos industriales). Si a eso le sumamos los frecuentes atascos y atrancos que se producen en la red de saneamiento de aguas residuales como consecuencia de la acumulación de toallitas, el resultado es que estos restos de animales, incluida la sangre, terminan saliendo al exterior.

Una piscina de aguas fecales en Leganés

Los vecinos de un bloque de viviendas del barrio de Leganés norte han hecho un llamamiento de auxilio durante los últimos días en los medios de comunicación. El problema es que una auténtica piscina de aguas residuales amenaza con inundar sus viviendas.

Según han explicado los vecinos afectados, la situación se está volviendo insostenible, especialmente para los pisos situados en la planta baja. El inmueble pertenece a la oficina pública de vivienda Ivima y, a pesar de las reiteradas quejas vecinales, nadie hasta ahora les ha sabido dar una respuesta ni, lo que es más importante, resolver el problema.

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